EL PRÍNCIPE CON BASTÓN
Había una vez un príncipe que vivía en Buenos Aires, y una princesa que había viajado a ver a su tía. Ella se enamoró de él. Ya se conocían de una fiesta de disfraces. El príncipe se llamaba Axel y ella, Daiana. Un día el príncipe mandó a su hermano Alexis a decirle a la princesa si quería salir con él y ella le contestó que sí.
Al otro día, cuando ella estaba jugando a las cartas con su hermana y su prima, vino Axel de jugar a la pelota y se lastimó el pie y Daiana lo ayudó dándole la mano para llevarlo hasta su castillo.
Después ella lo llamó y él vino con un bastón, luego la hermana y la prima de la princesa se metieron adentro, y ella quedó con el príncipe afuera. Él le estaba agradeciendo por lo que hizo, luego estaban por empezar a jugar a las cartas y vino el primo de la princesa de jugar a la pelota y se le estaba riendo porque ella estaba sola con el príncipe con bastón. Al otro día él dejó el bastón y empezó a caminar casi bien.
Un día él se fue a comprar unas cosas para el rey, ella se fue por detrás y él la esperó a la vuelta del castillo. El rey se enteró de que ellos salían juntos y le preguntó a su hijo:
-¿Por qué no me dijiste?
- Porque pensé que me iban a retar.
-No, hijo, no te voy a retar, te felicito porque conseguiste la mejor princesa del mundo.
Y se casaron, tuvieron hijos (pero muchos) y vivieron felices para siempre
JESSICA FERNÁNDEZ (1º 1ª)
